sábado, 30 de marzo de 2013

Capítulo 16





—Por qué no dejas de decir estupideces y comienzas a responder las hojas— al menos no lo negó, puede ser una estupidez cierta.
Comencé a contestar pregunta por pregunta de la inútil guía, -Para que darnos una guía si ni siquiera tendremos examen.- hoja que respondía la ponía a entre Harry y yo.

—Si no sabes las respuestas búscalas en el libro— hablo nuevamente sin voltear a verme, tal vez creía que las hojas que dejaba entre nosotros eran porque no las sabia.
— ¿Quien dice que no las se?— pregunte girándome hacia él, levanto su mirada y tomo todas las hojas que estaban en el sillón. Solo lo observaba mirando las hojas contestadas con tinta rosa. —Ya te lo dije Harry — me miro —Soy más lista de lo que crees.

¿Lista? soltó una carcajada 
A si es sonreí orgullosa 
No lo creo puso los ojos en blanco para luego regresarlos a la guía
Es que tu no entiendes Harry reí Te lo demuestro constantemente quite las hojas del sillón y las puse en la mesa de centro. Y soy tan lista... alargue que me he dado cuenta de algo... dije y solo sonrió y volteo su mirada hacia mí. 
¿De qué? pregunto divertido 
De que te encanto poniéndome de rodillas comencé a avanzar la corta distancia que había entre nosotros. De que te vuelvo loco su rostro estaba neutro, no sonrisa, no ceño fruncido, no nada. De que muy dentro de esa 'rudeza' que demuestras, hay sentimientos enfatice la última palabra.
¿Ah sí? pregunto con ironía ¿Que te hace pensar eso? puso sus manos en su nuca.
¿Que me hace pensar eso? sonreí y lo tome de los hombros Tu me senté en sus piernas poniendo las mías a sus costados. Saco sus manos y las puso sobre mi cintura para quitarme, pero ante un movimiento que hizo, quedamos recostados en el sillón, más bien, yo quede recostada con el sobre mí. Tus reacciones, me hacen pensar eso pase mis brazos por su cuello formando una cadena, evitando que se alejara. Te gusto Harry me atreví a asegurar.

Su mirada iba de mis labios a mis ojos, lo que daría por saber que era lo que pasaba por su mente. Tal vez había dado en el punto, tal vez si le gustaba. 
Eran escasos los centímetros que nos separaban, podía sentir su cálida respiración mezclarse con la mía, con su brazo izquierdo sostenía su peso, levanto su mano derecha y la acerco a mi rostro y con una suma delicadeza corrió un mechón de cabello que estaba sobre mi frente acomodándolo detrás de mí oreja. Dejo su mano en mi cuello y lentamente acorto la distancia entre nosotros. Uniendo nuestros labios de la manera más perfecta posible, por primera vez me besaba 'tiernamente'.
Sus labios se rozaban tan dulcemente con los míos, era completamente increíble, era tan diferente a los besos anteriores. Todos habían sido fantásticos y claramente este no había sido la excepción. -¿Fantásticos?- comenzó a subir un poco la intensidad bajando a mi cuello, por reflejo mis ojos se cerraron, disfrutando del placer que Harry se encargaba de producir en mí. 
Al sentir su húmeda lengua rozar mi piel, produjo cosas inexplicables en mi interior, algo que jamás había sentido, y para ser sincera me encantaba.

¿Así que crees que me gustas? su mano derecha, la que anteriormente se encontraba en mi cuello, bajo hasta mi pierna, en la cual comenzó a brindar aniquilantes caricias. Hice un sonido con la garganta como diciendo 'Si' Que estos 'encuentros' hinco sus labios en mi piel haciéndome soltar un gemido inconscientemente Son porque estoy 'enamorado' hizo un estúpido tono al decir esta última palabra.
Yo nunca dije eso dije aturdida y su mano en mi pierna comenzó a deslizarse hasta llegar a mi trasero. Pero ahora que lo dices mordí su labio inferior Puede que si lo estés soltó una amarga carcajada sin dejar su accionar de besarme y acariciarme.
Creo que te equivocas bajo nuevamente a mi cuello para luego regresar dejando un camino de besos por el margen de mi mandíbula. Puede ser que... susurro en mi oído Puede ser que solo quiera acostarme contigo, y adiós jugueteaba con el lóbulo de mi oreja. Esta vez fui yo la que soltó una carcajada Puede que sea que entre más te rechace más me deseas tu a mí Ok, este hombre me estaba volteando la jugada. Él no debía jugar conmigo. Pero no, en realidad te detesto sentí sus manos en mi clavícula, haciendo figuras abstractas con las yemas de los dedos. 
Entonces acabas de descartar todas mis opciones, sonreí sin abrir los ojos Así que queda 'Solo por sexo.' 

—Tal vez — dijo con una pícara sonrisa 
—No lo creo— conteste segura conectando nuestras miradas 
— ¿Ah no?— preguntó retóricamente
—No.
— ¿Y por qué no?— regreso a mi cuello tratando de aturdirme nuevamente. Y ¡Aplausos para este chico! Lo estaba logrando.
—Porque tú no eres así — asegure y este saco su rostro de mi cuello para verme a los ojos.
—Tú no sabes nada sobre mí— afirmo serio 
—Estas equivocado lindo— acaricie dulcemente su mejilla —No creas que eres el único que puede juzgar sin conocer— sonreí victoriosa.
— ¿Entonces no crees que sea así?— separo bruscamente mis piernas acomodándose entre ella.
— ¿Que vas a hacer?— hice una cara de terror — ¿Violarme?— pregunte y solté una carcajada
—No se le llama violación, si tú quieres.
— ¿Que estas queriendo decir Styles?— levante mi ceja izquierda — ¿Que YO Gabriela quiero acostarme contigo? ¡Ja!— comencé a reír —Por favor— dije irónica —Si yo quisiera acostarme contigo— cambie mi tono a uno más frio —Ya lo hubiera hecho hace mucho tiempo. — atrape su labio inferior, desatando un sensual beso y justo cuando comenzó a seguirme, corrí mi rostro.
—Te detesto— me dijo con asco.
—Yo más — nuevamente me aproxime a sus labios y esta vez fue él quien se hizo a un lado y se puso de pie. —Lo vez— rápidamente me pare al igual que él y lo abracé por la espalda —Eres tierno— solté una carcajada y note como quería reír —Mira— le dije rodeándolo —Vamos a llevarnos bien— me pare frente a él.
— ¿Que parte de ‘No me interesa convivir contigo’ no entiendes?— dijo con fastidio
—Entiendo la frase— sonreí —Pero sé que no lo dices en verdad— moví mi dedo índice alrededor de su nariz como tratando de hacerlo reír —Y sé que muy, muy pero muy adentro— me puse en las puntas de los pies —Quieres ‘convivir’ conmigo.
— Mira como me rio ¡Ja!— dijo sarcástico 
—Oh vamos Harry — curve mi labio inferior hacia afuera haciendo una mueca de tristeza —Hasta me compre unas botas de tu estilo— mire hacia abajo viendo las anti-glamurosas botas blancas.
—Pero yo no soy superficial como tú— enfatizo superficial
—Bueno entonces por qué no me dejas conocerte e intentas conocerme— sonreí de oreja a oreja 
—Ya te lo dije…
—‘No me interesa convivir contigo’— lo interrumpí, terminando la oración que seguramente diría.

sábado, 23 de marzo de 2013

Capítulo 15



— ¿Cuánto fue de lo de Gemma?— pregunto sacando su billetera de la bolsa trasera de su pantalón.
—No fue nada— deje mi bolsa en uno de los sillones de la sala —Fue un regalo que yo le hice a Gemma— era verdad, además yo creo que Harry se infartaría con la cuenta, cualquier persona lo haría. Excepto mi madre que tiene cosas más importantes que hacer que revisar en que uso mi tarjeta.
—Claro que no— dijo serio —Te lo pagare ¿Cuánto fue?— pregunto nuevamente
—Ya te lo dije.
—Si estas tratando de quedar bien, no lo vas a lograr comprando a mi hermana— me señalo con su dedo índice.
—Es de mala educación señalar a las personas— baje su mano —Y no— reí —No estoy tratando de quedar bien, y mucho menos tratando de comprar a tu hermana. — No mentía —Además ¿por qué me interesaría quedar bien contigo? ¿Quién te crees?— levante mi ceja izquierda. 
— ¿Lo ves?— hablo y dio un paso hacia mí —Primero me besas, te beso, te ‘ofendes’— seguía acercándose a mí y por ende  comencé a retroceder —Dices que solo tú puedes jugar conmigo, luego te gusto y ahora no soy nadie importante— su mirada era tan intimidante, -Estúpida pared, como te atreves a evitarme el paso- ya no podía retroceder más —Ves porque te considero una hueca, egocéntrica, que solo piensa en lo que le quiere y le conviene, que…— no lo deje seguir con mis ‘defectos’ y como otras veces lo tome del cuello y lo atraje a mí, solo que ahora yo marcaba el ritmo evitando que notara mi inseguridad ya que no estaba muy confiada de que me siguiera. Pero al parecer me equivoque. 
Apego su cuerpo al mío, tanto que ni la más mínima corriente de aire era capaz de pasar entre nosotros, sus manos se posaron en mi cintura sosteniéndome con firmeza. 
Su lengua se introdujo de abrupto en mi cavidad, el roce de su carnoso miembro con el mío era algo delirante. El abastecimiento de oxígeno en mis pulmones comenzaba a disminuir. Me separe de sus labios tratando de recuperar la mayor cantidad de oxigeno posible, eche mi cabeza hacia atrás dándole el acceso total a mi cuello, el cual con desenfreno comenzó a besar volviéndome totalmente loca.

Regreso a mis labios, rozaba, mordía, succionaba, hacía con ellos lo que le placía, y por mí, no había problema alguno. Una de sus manos que masajeaban mi cintura mortalmente comenzó a bajar hacia mi cadera hasta llegar a mi pierna, alzo está a la altura de su cadera, en automático entendí y me sujete de su cuello, sin nunca separar nuestros labios me levanto como si pesara menos que una pluma, rápidamente forme una llave con mis piernas alrededor de su cintura para evitar ser atraída hacia el piso. 

Seguía besándome de esa manera tan intensa y única. ¿Pero cómo podía causar tanto en mí con un simple beso? Eran increíbles las sensaciones que me hacía experimentar.
Una de mis manos se mantenía en su nuca, atrayéndolo hacia mí dándole mayor profundidad al pasional beso, además me aseguraba de que no se alejara de mis labios, aunque dudo que este pensamiento le pasara por la mente.
Su lengua recorría cada centímetro cuadrado de mi boca, robándose por completo mi abastecimiento de oxígeno, no podía más, era seguir con ese beso pero prácticamente morir. Mi otra mano se encontraba en su mejilla, subí está haciendo hacia atrás el cabello que caía en su frente, corrí mi rostro unos centímetros solo para poder respirar, pero él no se detenía. ¿Qué acaso pretendía matarme? 
Comenzó a bajar con sus besos por mi mejilla hasta llegar a mi cuello. Por instinto eche mi cabeza hacia atrás, dándole el acceso total a esa zona tan sensible de mi anatomía.

Rosaba, mordía, besaba, simplemente hacia lo que le placía conmigo. Así que era ahora o nunca, más bien era ahora o más delante no podré detenerme.
Lo tome de la barbilla y lo guié nuevamente hacia mis labios y lo bese nuevamente, como si no hubiera mañana. –Dios, este hombre no puede ser más provocativo- afirme en mi interior, al mismo tiempo que -en contra de mi voluntad- lo separe de mis labios uniendo nuestras frentes. Abrí lentamente los ojos, ya que aún estaba tratando de controlar mi sistema nervioso. Sus labios estaban el doble de gruesos y de un rojo cereza. Me había equivocado. Si podía ser más provocativo. Sus ojos esmeralda me miraban fijamente, mas no fríamente como de costumbre, tal vez me arrepentiría de esto.

—…Y te volví a besar— susurre sobre sus labios con un tono de voz victorioso, antes de deshacer la llave que había formado con mis piernas alrededor de él.

Me bajo esquivando mi mirada, la verdad yo esperaba un ‘¡Lo ves! ¡Ves cómo eres!’ pero nada. Su cara de estupefacción era indescriptible, no sé si era enojo, decepción, fastidio. O tal vez una mezcla de todas. Acomode mi vestido y mi cabello antes de sacarle la vuelta. 
— ¿Empezamos con la guía?— pregunte como si absolutamente nada hubiera pasado. Me di la media vuelta para poder verlo, pero él seguía de frente a la pared, y me ponía algo nerviosa. Tal vez había alterado ‘algo’ más que su respiración. 

Se dio la vuelta y camino hacia mí, mis nervios con obvia razón aumentaron. Todo pasaba por mi mente, -¿un golpe? ¿Violación?- reí estúpidamente en mi interior por mis tontos pensamientos. Estaba a solo unos centímetros de mí, pero no se acercó a mí como yo creía que lo haría, me saco la vuelta y se dirijo a la mesa que estaba detrás de mí y tomo el enorme paquete de hojas. Tomo la mitad aproximadamente y me lo entrego. 
Sonreí y tome las hojas, mi objetivo era hacerlo enloquecer por completo. Y si a la primera le doy el ‘paquete completo’ no serviría de nada. Además no soy tan fácil. En realidad no lo soy, Solo a él le estoy facilitando un poco las cosas.

Me senté en el sillón donde había dejado mi bolsa, Harry también se sentó pero del otro extremo del sillón, no era mucha la distancia ya que era un sillón solo para tres personas. 
— ¿Por qué tan lejos?— pregunte divertida —No muerdo— tome un bolígrafo color rosa de mi bolsa —…A menos que quieras— volteé a verlo y una pequeña sonrisa comenzaba a asomarse en su rostro, pero al sentir mi mirada la desapareció. —Oh vamos— alargue riendo —Sé que quieres reírte— le dije y solo negó con la cabeza sin despegar la mirada de las hojas. —Te vuelvo loco, lo sé— dije entre risas.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Capítulo 14






Presioné el botón que quitaba el seguro y la alarma para que pudiéramos subir al auto.
— ¿A dónde iremos?— pregunto Gemma sonriente
—Iremos a el centro comercial — le respondí —A buscar el vestido más lindo.
El trayecto al centro comercial fue divertido, Gemma me preguntaba cosas como cuál era mi color favorito, animal preferido. Al contrario de su hermano mayor, a ella si le interesaba conocerme. 

Entramos tienda por tienda, y no había tienda en la que no saliéramos con bolsas, al igual que no había tienda por la que no se deslizara mi tarjeta.
Nos sentamos en una banca para descansar, más bien yo ya que traía todas las bolsas.
—Gabi, solo veníamos por un vestido— dijo riendo la pequeña
—Creo que me emocione un poco— le conteste entre risas.

— ¿Te gustaron?— le pregunte ya cuando íbamos de regreso a su casa
—Mucho— contesto con una enorme sonrisa —A mi mami le gustaban con florecitas— ¿le gustaban? — Harry dice que está en el cielo…— dijo mirando hacia la ventana, de inmediato un nudo se me hizo en la garganta. —…Con mi papi cuidándonos— sonrió —Les gustaran mucho los vestidos que me compraste— volteo a verme y yo hacía todo lo posible por contener mis lágrimas. 
—Claro que si hermosa.

Dios tenía un horrible nudo en la garganta. Eso explicaba por parte la dura forma de ser de Harry. Trabajar, estudiar y además hacerse cargo de sus pequeños hermanos. 
A pesar del que el comentario de Gemma me había dejado en shock, el regreso fue divertido con sus inocentes preguntas sobre su hermano y yo.
Bajamos del auto y de cerca de veinte bolsas que había en la maletera del auto de Harry la mitad o más de la mitad eran de Gemma.
Ella tomo algunas, y yo tome el resto y una bolsa de las mías con una ‘compra especial’
Llegamos a la puerta y tocamos el típico timbre de las tres campanas. Y fue Harry quien nos abrió.
—Son las tres veinte de la tarde— nos informó en tono de reproche.
— ¿Las tres?— pregunte sorprendida, nos habíamos demorado solo tres horas comprando. —Corre Gemma— le dije acelerada —La fiesta es a las cuatro— le dije recordando la hora marcada con letras rosas en la invitación.
Ambas corrimos escaleras arriba ignorando por completo a Harry.
Seguí a la pequeña a la que seguramente sería su habitación. De un color rosa su dormitorio era decorado por muebles blancos, con una cama de color rosa pálido, digna de una princesa. Con un delgado velo que la cubría cayendo desde el techo, sin duda hermosa.

—Que linda habitación que tienes— le dije mientras corría el velo que cubría la cama para poner todas las bolsas en esta. Ella solo soltó una ligera risa. —Bueno anda a ducharte— le dije y asintió con la cabeza antes de entrar al baño.
Comencé a guardar toda su ropa nueva, efectivamente si tenía vestidos, pero se notaba a simple vista que no le quedaban más.
Guarde todos dejando afuera un vestido rosa con florecitas blancas, tal y como a Gemma y a su madre les gustaban, Además unas sandalias blancas. 
Salí de la habitación para que se vistiera, una vez lista me llamó, se veía preciosa.
—Ven para peinarte— le dije y comencé a acomodar su cabello tan parecido al de su hermano mayor. — ¿Lista?— le pregunte y con una enorme sonrisa asintió con la cabeza, estábamos por salir cuando recordé. — ¡Espera!— le dije señalando mi bolsa con la ‘compra especial’ y Gemma comenzó a reír.
Me senté en la cama y me quite mis tacones y sacar una par de botas blancas de la caja que estaba en la bolsa. { http://www.polyvore.com/cgi/set?id=73724869&.locale=es}
—Seguro le gustaran— apoyó la pequeña sin parar de reír —…Pero tú las odias— tenía razón, Las detestaba.
—Estas en lo cierto— agregué entre risas —Pero son cómodas— algo bueno tenían que tener.
Bajamos las escaleras en pequeños saltos, y a la mitad de la escalera logre ver a Harry abajo viéndonos.
—Acá te hago entrega de tu princesa— la pequeña estallo en risas, Yo miraba a Harry expectante, esperando que le dijera algo, mínimo un ‘Que bonita’ pero el desabrido de su hermano solo la alzo en sus brazos y le dio un beso en la mejilla.
Cambie mi mirada ‘expectante’ por una fulminante y sin que Gemma se diera cuenta articule sin sonido ‘Dile algo’ 
Me obedeció —Te vez hermosa. — le dijo y Gemma rodeo su cuello con sus brazos. —Ve y llama a Liam, para ir a dejarte— le dijo bajándola y esta volvió a subir las escaleras para llamar a su hermano. — Te veo más…— seguramente era ‘baja’ ya volteo hacia abajo buscando mis tacones, pero estos no estaban más. 

— ¿Y eso?— soltó una carcajada di un paso hacia atrás para subir al primer escalón y estar más a su altura.
—Bueno, ya que siempre me críticas y me dices que soy una ‘hueca’ por mi forma de vestir— Harry seguía riendo —Tal vez— alargue —Con esto ya no digas que soy más ‘estúpida’— sonreí —Porque ambos sabemos que tú sabes que no lo soy.
—No logro entender por qué tienes tanto interés en agradarme— dio un paso hacia mí — ¿Me lo puedes explicar tú?— me miraba fijamente — ¿Me puedes decir por qué tienes tanto interés hacia mí?
—Puede ser porque quiero que seamos amigos…— pase mis manos por su cuello —…o puede ser que me gustes— era más que obvio que no le diría ‘Por una apuesta que hice con Louis.’

— ¿Yo? — Soltó una carcajada — ¿Gustarte? Por favor— dijo irónico —A ti te gustan los engreídos esos, con dinero, popularidad y autos deportivos— describió con exactitud a Zayn. 
—Tú me criticas mucho sin siquiera conocerme— empecé a acariciar su cabello.
—No necesito conocerte más para saber cómo eres— contesto seguro
—Ya te lo dije Harry — mientras me acercaba lentamente a sus labios —Voy a hacer que te tragues tus palabras— susurre sobre sus labios, los cuales entre abrió esperando que lo besara. Pero al contrario, lo solté y de un brinco baje el escalón. Sacándole la vuelta camine hacia la puerta. En segundos Gemma y Liam bajaban las escaleras. 
— Harry — dijo el pequeño — ¿Puedo ir a casa de Demian?— perfecto tendríamos la casa para nosotros solos.
—Está bien, pero pasarse por ti a la misma hora que por Gemma— le dijo y Liam sonrió.
—Lindas botas Gabi — dijo Liam riendo 
—Lo ves…— alargue dirigiéndome a Harry —Tu eres el único que no las aprecia. — Le reclame 
—Si claro— dijo sarcásticamente —Bien sabes que te estás muriendo por ponerte tus zapatos y tirar esas a la basura. — tenía razón.

Después de detenernos en una tienda de juguetes, para comprar un regalo, dejamos a Gemma en la fiesta de cumpleaños y a Liam en casa de su amigo. La fiesta terminaba a las ocho de la noche, así que tendríamos casi tres horas y media solos.

domingo, 17 de marzo de 2013

Capítulo 13




—Louis se llevó mi auto— le informe — ¿me llevas?— pregunte sonriente
—No queda de otra— contesto de mala gana y comenzó a caminar. Cerré mi casillero y camine detrás de él hasta que lo alcance.
—Gabriela — me hablo Eleanor que caminaba hacia nosotros, le di una dura sonrisa sin dejar de caminar como lo había hecho ella. — ¿Has visto a Louis?— pregunto tímida
—Estacionamiento— conteste sin ponerle mucha atención.

—Así que no tienes amigas— pregunto mientras caminábamos por el estacionamiento hacia su auto 
—No las necesito— conteste segura
— Según lo que veo Louis es el único que tiene ‘acceso’ a ti ¿cierto?
—Si…— conteste y reí — ¿Y desde cuando te interesa saber de mí?
—Simple curiosidad, la forma en la que trataste a esa chica me confirma que eres la persona más engreída que conozco— solté una carcajada
— Mira que coincidencia, tus eres la persona más engreída que conozco…— dije pero me arrepentí —No… April lo es— reí —Tu eres el más antipático y amargado que conozco— sonreí hipócritamente.

— ¿Por qué no me dejaste platicar con tus hermanos?— le pregunte cuando íbamos en el auto 
— No me interesa que se relacionen contigo— contesto fríamente —Así que no te les acerques mucho— dijo mientras comenzaba a estacionarse.
Entramos a la casa y todo parecía tranquilo hasta que de pronto un castaño bajo corriendo las escaleras, traía a la pequeña Gemma en su espalda y estos eran perseguidos por Liam.
—Dan te he dicho que no corras en las escaleras y menos si traes a  Gemma— le dijo acercándose a él para tomar a la pequeña en sus brazos.
— ¡Mira Harry!— dijo Gemma con suma emoción mientras le mostraba un papel con una princesa en uno de los lados.
—Gracias Dan— se dirijo al chico previamente regañado
—No es nada— sonrió antes de salir por la puerta
— ¡Mira!— repitió la niña — ¿Puedo ir? ¿Me dejas ir? ¡Por favor!— decía con una voz que si se estuviera dirigiéndose a mí, hubiera sido imposible decirle no.
—A ver ¿Qué es?— la bajo y tomo el papel para leerlo. Me mataba la curiosidad que causaba tanta emoción en la pequeña. Me acerque y por encima del hombro de Harry leí el papel rosa que tenía en sus manos. Era una invitación a una fiesta de cumpleaños.
— ¡Hay que lindo!— dije con emoción — ¿Qué lindo vestido usaras?— le pregunte sin siquiera esperar la respuesta de Harry.
—Hey Hey Hey — dijo tranquilizándonos a ambas, ya que Gemma saltaba de la emoción. — Aun no he dicho que si — contesto serio, lo que no entendía era ¿Por qué el autorizaba o denegaba la salida de la pequeña? ¿Y sus padres?
—Por favor Harry — dijo la pequeña con sus hermosos ojos color esmeralda
—Oh vamos Harry déjala— agregue y Liam solo se limitaba a reír. —Ayúdanos Liam— le dije riendo.
— ¿Me darás pastel?— pregunto el pequeño a su hermana
—Si— contesto sonriente 
—Déjala ir Harry — se unió
Después de nuestros insistentes ‘Déjala ir’ y miradas de cachorros abandonados Harry accedió a que la pequeña fuera a su primera fiesta sola. 
— ¿Y qué te pondrás?— Harry rodo los ojos
—Tiene seis años Gabriela no es superficial como tú— se sentó en uno de los sillones de la sala
—No importa que tenga seis años, es una niña y a todas les gusta verse lindas— le conteste y regrese mí mirada a la pequeña.
—Yo no tengo vestidos lindos como los tuyos— dijo mientras tocaba mi vestido, voltee indignada con Harry
— ¿No tienes vestidos?— pregunte para asegurarme de haber escuchado bien, y la pequeña asintió con la cabeza. 
—Si tienes Gemma— le contesto Harry —Hace poco vi tu closet
—No me quedan más— dijo elevando los hombros
— ¿No tiene vestidos?— susurre matando con la mirada a Harry —Trae tus zapatos— le dije con una sonrisa a la pequeña 
— ¿Para qué?— pregunto sin entender
—Iremos de compras— le dije y una enorme sonrisa apareció en su exquisito rostro
—Hey hey hey— se puso de pie Harry
—Solo chicas— lo señale —Y no me importa que no quieras— Gemma subió corriendo las escaleras —Es una niña Harry y no tiene vestidos— le reclame 
—Si los tiene— contesto —Solo que no sabía que le gustaban tanto.
— ¿Si sabias que tienes una HER MA NA?— separe en silabas — ¿Si notas el cambio en la última silaba? HER MA NA— volví a repetir —No hermano es HER MA NA.

—Sí, si ya entendí— dijo con fastidio
—Es que es increíble eso Harry — seguía indignada, Liam mientras reía camino escaleras arriba. 
—No necesito que la lleves, yo la llevare es mi HER MA NA, mi responsabilidad— no era responsabilidad suya, era de sus padres. Los cuales hasta ahora no he conocido.
— ¿Qué?— solté una carcajada — ¿Para qué Gemma regrese con bolsas llenas de chaquetas de piel y tennis negros?— levante una de mis delgadas cejas —No lo creo.
—Creí que había sido claro, no te quiero en mi vida y mucho menos en la de ellos— se refería a sus hermanos.
—Demasiado tarde— le dije caminando hacia las escaleras ya que Gemma bajaba por estas. Cambiaria ese short de mezclilla y blusa celeste, por un hermoso vestido.
— ¿Lista?— le pregunte sonriente 
— ¡Sí!— alargo emocionada.
Abrí mi bolsa para buscar mis llaves pero recordé que Louis se había quedado con mi auto. Volteé a ver a Harry quien me miraba divertido ya que sabía que no traía mi auto.
—Dame tus llaves— le dije, más bien ordene y soltó una carcajada
— ¿Estás loca?
—No—sonreí hipócritamente —Dame las llaves— repetí pero él no se movía en lo absoluto 
—No te daré nada— se cruzó de brazos —O yo las llevo… o no van.
—Gemma— llame con voz tierna —Me esperas en el auto ¿sí?— le dije y la pequeña asintió con la cabeza para después salir por la puerta hacia el auto de su hermano. — ¿Seguro que no me las darás?— me acerque lentamente hacia donde estaba él.
— ¿Que no me escuchas?— pregunto de mala forma mientras que yo seguía aproximándome hacia el
—Si te escuche— afirme —Pero sé que cambiaras de opinión— sonreí mostrando mi dentadura
—Tú no sabes nada…— no término la oración ya que lo tome de la nuca, atrayéndolo firmemente hacia mis labios, sus labios comenzaron a mezclarse con los míos. Pero en cuestión de segundos corrió su rostro.
— ¿Qué?—soltó una amarga carcajada — ¿Crees que con un beso logras lo que quieras?
—No lo sé— sonreí mientras me acercaba a su cuello —Dime tu— le dije mientras comenzaba a depositar pequeños besos sobre los lunares esparcidos en esa zona de su piel
—Eres patética— rio —Sabes…— no lo deje terminar cuando ya había sacado las llaves de su bolsillo. Se quedó estático mientras yo me alejaba de él prácticamente corriendo.
— ¿C…Como hiciste eso?— no alcance a llegar a la puerta ya que me había tomado del brazo obstruyendo mi huida.
—Soy más lista de lo que crees— di un fugaz beso en sus labios haciéndolo fruncir el ceño, me libre de su agarre y salí corriendo lo más rápido que mis tacones permitían.

miércoles, 13 de marzo de 2013

Capítulo 12


Las preguntas para mi eran fáciles, así que comencé con la primera hoja, rápido la termine, la segunda hoja igual. 
Harry paso por el umbral de la puerta en su brazo derecho cargaba un par de libros y con la mano derecha tomaba un ¿cigarrillo? 
Llevo este a su boca y succiono de este —Ten— dijo entregándome los libros para después exhalar el humo. Yo solo lo miraba incrédula.
—Vives con dos pequeños— me puse de pie y camine hacia el — ¿Y fumas dentro de la casa?
—No es algo que te incumba— volvió a llevar a su boca el adictivo cigarrillo, para después lanzarme el humo en la cara.
— Harry …—dije seriamente —Si tú eres un amargado y quieres acortar tu vida con eso…— le arrebate el cigarro de las manos —no te lleves entre las patas a tus hermanos— apague el cigarrillo en la suela de mis zapato.
—Devuélvemelo — ordeno molesto 
—Claro— con un simple tirón lo partí a la mitad y lo puse en la palma de su mano. Cerró con enojo su mano, y volteo a verme asesinamente.
— ¿Por qué no desapareces de mi vida?— dio un paso hacia mí para pronunciar con furia 
— ¿Seguro que…— di un paso hacia el reduciendo nuestra distancia a Cero. —…Quieres que desaparezca?— nuestras respiraciones se mezclaban debido a nuestra cercanía. Y nuestras miradas estaban tensamente conectadas. Nuevamente yo tuve la iniciativa, y al contrario de la última vez, Harry no tardó en responder mi beso. Pase mis manos por su cintura dejándolas en su espalda para así atraerlo aún más a mí. Su lengua sin pudor alguno entro en mi cavidad, la recorría libremente y sin duda me encantaba. Me besaba de una forma tan intensa, que simplemente me atontaba. Sus manos masajeaban mi cintura cuando una pequeña risa hizo que nos separáramos bruscamente. 
— ¡Si son novios!— dijo Gemma sonriente tapando su boca con sus pequeñas manos como tratando de retener su risa.
Volteé apenada a ver a Harry quien estaba rojo, no sé si por la pena o por el coraje. Siendo sincera me asustaba un poco.

—No preciosa…— hable evitando la fulminante mirada de Harry. Me acerque a ella y me puse en cuclillas para estar a su altura.
—A que si— dijo sonriente —Los novios hacen eso— se rio tímida, no puede evitarlo y reí con ella. 
—No sirves para nada— susurro y tomo a la pequeña alzándola en sus brazos, Para después caminar hacia las escaleras.

Tal vez esto no iba a funcionar, lo único que estaba logrando era hacerlo detestarme más. Pero tampoco podía perder la apuesta. Había un difícil debate en mi interior. Hasta que finalmente llegue a una conclusión. 
Seguiría intentando conquistar a Harry, pero no en su casa. No quiero causarle problemas con su familia.
Me di la media vuelta y tome mi bolso junto con la mitad de las hojas de la guía.

— ¿Tan pronto te vas?— escuche detrás de mí justo cuando estaba por salir de la casa
—Creo que es mejor que terminemos el trabajo por separado— le conteste, me tocaba hacerme la víctima.
— ¿Qué? ¿Te cansaste de fastidiarme?
— ¿Yo? ¿Cansarme de fastidiarte?— pregunte irónica —Mira quién habla, el que se la pasa ofendiéndome y diciéndome ‘Hueca’ 
—Solo digo la verdad— dijo engreído 
— ¿Es lo que realmente piensas?— comencé a acercarme nuevamente, sus nervios se notaban a kilómetros debido a mi cercanía, mi nariz rozaba la suya y su respiración cada vez se aceleraba, capture delicadamente su labio inferior, pero no lo bese. Solo delineé a este con la punta de la lengua —…porque mira cómo te pone esta ‘hueca’— solté una carcajada al notar el estado en el cual lo tenía. Me gire hacia la puerta pero justo cuando gire la perilla, Harry me tomo fuertemente de la cintura girándome nuevamente sobre mis talones. Puso rápido ambas manos en mi cuello atrayéndome bruscamente a sus labios. 
Su forma tan intensa y pasional de besar me hacía sentir lo que Zayn jamás logro, Con un solo beso Harry hacia una revolución en mi interior. Pero aquí las cosas se hacen como yo quiero. Lo empuje lo más fuerte que pude alejándolo de mi fingiendo estar molesta las hojas que traía en mis manos se las lance.
— ¿Que te ocurre?— le grite indignada
— ¿Que te ocurre a ti?— me grito enojado mientras veía todas las hojas en el piso
—Como te atreves a besarme— le reclame ‘furiosa’
—Ah ¿entonces solo tú puedes hacer lo que se te pega la gana conmigo?— volvió a acercarse 
—Así es— golpeé suavemente su mejilla dos veces y abrí la puerta —Te veo mañana— dije y salí casi corriendo. 

-Bien…- pensé dejándome caer en mi cama –ya es un progreso que él me haya besado- no pude evitar sonreír estúpidamente al recordar sus labios sobre los míos.

{ http://www.polyvore.com/cgi/set?id=73723179&.locale=es} Subí a mi auto, como todas las mañanas para dirigirme al colegio. 

—Sabes… no hay nada que considere más estúpido que venir aquí en vestido y tacones— Harry caminaba rápidamente por los pasillos.
— ¿Estúpido?— reí —No sé porque consideras ‘estúpido’ que me preocupe por verme linda— dejo de caminar riendo, pero yo seguí caminando como si nada.
—Por favor— dijo en tono de burla —Tu no te preocupas por ‘verte linda’— hizo unas marcadas comillas con sus dedos —…Tú te preocupas por ser mejor que las demás— podía que tuviera algo de cierto lo que hablaba —Solo es superficialidad — me miro con asco —Todas son iguales, tu… April, las dos sin vidas que la siguen…— nuevamente con las comparaciones. —Hasta el imbécil de Zayn es igual.
—Sabes a mí lo que me parece estúpido…— le dije riendo mientras volteaba a verlo, pero solo elevo los hombros como diciendo ‘No me importa’ —Aunque no te interese te lo diré— sonreí —A mí me parece estúpido las personas que ‘adoptan’ un estilo queriendo aparentar algo que no son.
— ¿Qué es lo que me estas queriendo decir?— pregunto nuevamente deteniéndose con el ceño fruncido
— ¿Yo?— me burle y me detuve para verlo —Yo no te estoy diciendo nada… pero si el saco te queda…— continúe con mí caminar hasta entrar al salón.

Me senté en mi lugar de siempre y en cuestión de segundos tenia a Louis detrás de mí. 
— ¿Y?— pregunto
— ¿Y qué?— le pregunte sin entender
—Comienzan rumores acerca de ti y de Styles.
—Hay Louis estas peor que una chica— reí 
—Hey…— alargo —Yo no he escuchado, Eleanor me conto que April hablaba con los clones sobre ustedes dos. — Explico
—Pues no— le dije —Esto creo que será más difícil de lo que planee— confesé. En el rostro de Louis se formó una victoriosa sonrisa. —Pero eso no quiere decir que perderé la apuesta— agregue haciéndolo quitar esa altanera mueca de su rostro.

— ¿Terminaremos el trabajo… o saldrás corriendo como ayer?— pregunto Harry mientras yo terminaba de guardar mis libros en mi casillero.

— ¿No era que no querías nada conmigo?— pregunte ya que ayer no me quería ni cinco centímetros cerca de él.
—Eso aún sigue vigente— contesto serio —No me interesa en lo absoluto tenerte cerca— afirmo —Pero son demasiadas preguntas las de la guía.
—Hay que lindo— dije con voz enternecida y acaricie su mejilla —Me estás diciendo que me necesitas— inmediatamente frunció el ceño 
— ¡No claro que no!— dijo casi en un grito — ¡Yo nunca dije eso!
— ¡Gabriela, Gabriela!— era Louis quien venía corriendo hacia donde estábamos Harry y yo. Llego y me tomo rápidamente de la muñeca para alejarnos un poco.
—Dame tu auto— dijo en tono de súplica 
—Oh si claro— dije sarcásticamente —No te preocupes por mí, yo tengo un árbol de autos en el patio de mi casa junto al árbol de dinero— le sonreí y rodo los ojos
—Solo será por hoy— paso con desespero su mano por su cabello —Te lo regreso mañana.
— ¿Pero por qué no traes el tuyo?— le pregunte 
—Mi hermano lo necesitaba porque el suyo no andaba bien— aun no lograba entender su desesperación
—Pero…
—Basta de peros— me interrumpió —Tengo una importante cena con Eleanor y no puedo pasar por ella en taxi— solté una carcajada
— ¿Importante cena?— pregunte entre risas mientras me seguía mirando suplicantemente —Espera…— le dije y volteé hacia donde aún seguía Harry con cara de háblame y te rompo la boca de un golpe. —Styles— grite para que volteara hacia mí — ¿En qué vienes?
—En mi auto— respondió sin entender 
—Tienes suerte— le dije riendo mientras sacaba las llaves de mi bolsa y se las entregue. 
—Gracias— repitió cinco veces antes de besar mi mejilla y salir corriendo nuevamente.

lunes, 11 de marzo de 2013

Capítulo 11



Deje la mayoría de mis libros en el casillero, afortunadamente no había tanta tarea, solo unos cuantos problemas de matemáticas y algunos resúmenes. Caminaba hacia la salida del edificio y no lograba ver a Harry. -Más te vale que no te hayas ido Styles...- pensé mientras lo buscaba en el campus.

—Tú no te preocupes que tenemos todo el día— una sarcástica voz me saco de mis pensamientos
—Te estaba buscando— le dije sonriente
—Si, como sea— rodo los ojos y comenzó a caminar —Sígueme— me indico mientras se subía a su motocicleta. - ¡Dios mío! lo que tiene de amargado, lo tiene de sexy- pensé mientras lo veía. Sacudí levemente mi cabeza, para salir de mis pensamientos.
—S...Si— conteste y camine hacia mi auto, lance mi bolsa en el asiento trasero. No fue muy largo el trayecto, solo tenía algo de dificultad al tratar de seguir la alta velocidad de Harry. 
De pronto Harry se subió a la acera, estacionando su motocicleta ahí, aunque no parecía una casa, seguramente sería su trabajo. Me estacione y baje no muy segura. 
—Espérame— me dijo antes de entrar a una enorme tienda de música. De todas formas entre detrás de él. 
— ¡Harry!— un rubio detrás del mostrador le saludo al mismo tiempo que estrechaban fuertemente sus manos — ¡Wow! ¿Y tú eres?— le saco la vuelta a Harry acercándose hacia mí.
—Nadie, no es nadie— Harry lo tomo de cuello de la camisa y lo regreso al mostrador. —Concéntrate en tu trabajo— le ordeno.
— ¡Harry qué bueno que viniste!— una pelirroja que bajaba las escaleras con ambas manos ocupadas por dos cajas —Llamo Dan...— su mirada se quedó fija en mí, analizándome de pies a cabeza. Su cabello entre rojizo y naranja, levemente desordenado, jeans desgastados, converse viejos y maltratados. No me extrañaría que fuera la... la novia de Harry.
— ¿Que dijo Dan?— pregunto Harry con cara de desespero
—Que... que no podría pasar por Gemma ni por el pequeño— dejo las cajas en el suelo. 
—Pero... ¿por qué?— el desespero, aumentaba.
—Su auto...— dijo haciendo una seña con sus manos como de explosión y junto con el rubio rieron.
—No puede ser— dijo mirando el reloj en su mano —Me va a matar— dijo caminando rápidamente hacia la puerta —Espérame aquí— me indico.
—Sí, aquí espéralo— sonrió el rubio cuyo nombre desconocía, mientras que era aniquilado con la mirada por la pelirroja.
— Harry pero...— hable y regreso 
—No— tomo su cabello entre sus manos —No puedo ir en la motocicleta por ella— regreso al mostrador —Dame tu auto— le dijo al chico quien asintió con la cabeza y se agacho. 
—Aquí tienes— saco sonriente una patineta
—Mike— le dijo fulminantemente. Según lo que entendía la pelirroja no era su novia, y la tal 'Gemma' era muy importante, así que seguramente que ella si sería la... novia. —Lo siento Harry, en esto vine— sonrió.
— ¿Al?— se dirijo a la chica
—Camine— sonriente subió los hombros.
— ¿Pero qué? ¡Siempre está lleno el estacionamiento por sus autos!— dijo alterado y yo solo me limite a agitar las llaves de mi lujoso auto.
Se dio la media vuelta para verme y le sonreí. Acorto nuestra distancia con aproximadamente cinco pasos.
—Nunca te pediría algo a ti— susurro en mi oído para después salir de la tienda. Le gustaba sufrir ¿no? Salí detrás de él, después de escuchar un 'Nos vemos' del tal Mike.

—Sabes...— le dije por la espalda, gracias a la altura de los zapatos, alcanzaba con precisión su oído —Hieres mis sentimientos— lo rodee poniéndome frente a él. 
— ¿Enserio?— levanto una de sus naturalmente bien definidas cejas. Acortaba lentamente la distancia entre ambos. Mientras dejaba mis llaves en una de las bolsas de su chaqueta.
—No— solté una carcajada y me di la media vuelta y camine hacia mi auto. Solo que esta vez subí al lado del copiloto.
—Al parecer si aceptaste mi ayuda...— dije sonriente cuando Harry subió al auto.
—No, solo subí y tome tu auto— aclaro
— ¿Entonces viene siendo un robo?— pregunte mientras miraba su perfecto perfil.
—Exacto— afirmo 
— ¿Y quién es Gemma?— me aventure a preguntar.

—No te importa— dijo de mala gana 
—Claro que me importa— volteé a verlo —Me interesa saber por quién, llegaste al grado de pedirme ayuda— como gozaba de hacerlo enojar.
—Haber— dijo con fastidio, este hombre no tenía ni una pizca de sentido del humor —No te pedí ayuda. Serias la última persona a la que le pediría algo— serio regreso su mirada al camino.
—Una pregunta…— dije divertida — ¿Por qué tanto ‘odio’...— hice comillas —…Hacia mí?— la verdad me intrigaba, ya que nunca en mi vida. Algún chico me había rechazado y/o tratado tan mal como él lo hacía. 
Se estaciono en un enorme parque, había muchos autos alrededor, la verdad no reconocía donde estábamos.
—Detesto a las personas como tú— hablo —Falsas y engreídas que piensan que solo por ser ‘lindas’ pueden hacer lo que se les pegue la gana— apago el auto.
— ¿Así que piensas que soy linda?— me gire hacia el 
— ¿Lo ves?— bufo —No puedes ser más hueca porque no te da tiempo de arreglarte— saco las llaves y bajo del auto.
- ¡Es que es un estúpido!- pensé molesta. –Este tipo realmente piensa que soy más tonta que nada- solo de una cosa estoy segura. Se va a arrepentir.
Espere en el auto cerca de cinco minutos hasta que por fin logre verlo caminar hacia el auto, cruzaba la calle para después atravesar el parque. Pero lo que me llamaba la atención era la que seguramente sería ‘Gemma’
- ¿Es su hermana? Si seguro que es su hermana- tenía un pequeño debate en mi mente al ver al ‘rudísimo’ Harry Styles con una pequeña de unos 5 años aproximadamente. Sin duda era hermosa, finas facciones, nariz respingada, cabello claro y crespo – ¿O su hija?- digamos que un poco de pánico se apodero de mi –Tal vez es casado, con esposa, hijos ¿Pero cuántos años tiene? ¡Tal vez por eso se resiste a mí!- cada vez se acercaba más y mi rostro de ¿estupefacción? Era imposible de ocultar –Es que es tan parecida a él- respire profundamente y me gire en el asiento para ver hacia el frente – ¿Y el pequeño?- recordé – ¿Otro niño?-
Escuche que se abría la puerta de atrás y Harry sentó a la niña detrás del asiento del piloto. La pequeña no paraba de hablar, con su aguda voz entre cortada podría entender que hablaba sobre sus tenis. Harry abrocho el cinturón de seguridad y subió al auto en el lado del piloto. Gemma, no se había dado cuenta de mi presencia hasta que volteo y me sorprendió observándola.
—Hola— dijo con una hermosa sonrisa — ¿Harry? — llamo a su ¿hermano? ¿Padre? — ¿Ella es tu novia?— pregunto con una risita cubriendo su boca. – ¡NO ES SU HIJA!- celebre en mi interior
— ¿Yo?— solté una carcajada y voltee a ver a Harry quien solo rodo los ojos —Claro que no— le sonreí —Soy solo su compañera en un trabajo. — Le hablaba con ternura —Soy Gabriela — me presente.
—Yo soy Gemma— no tenía una idea de lo aliviada que me sentía al saber que era solo una pequeña, así no tendría que deshacerme de nadie. 
— ¿Harry es tu hermano?— le pregunte a ella ya que si le preguntaba a él, diría ‘Que te importa’ La pequeña asintió con la cabeza. —Oye ¿y quién te hizo esas coletas tan lindas?— le dije y Harry volteo bruscamente hacia mí y me fulmino con la mirada. ¿Pero que había dicho?
—Ali me las hizo— dijo sonriente — Harry me las hace horribles— soltó una carcajada, es imposible que esa dulzura fuera familiar de él amargado de Harry.
—Bueno basta de preguntas si— dijo Harry seriamente. Me gire nuevamente en el asiento y volteé mi mirada hacia la derecha. 

Íbamos en silencio, yo sin entender por qué Harry no me dejaba hablar con Gemma. Salí de mis pensamientos cuando el auto se detuvo. Estábamos frente a un colegio. Harry hizo accionar el claxon del auto dos veces. Y al igual que Harry y Gemma un castaño claro se acercó al auto. Como no conocía el auto dudo un poco, hasta que Harry bajo el vidrio del auto.
— ¿Y este auto? ¿Y… quien es ella?— preguntó el niño al cual le calculaba unos ocho o nueve años.
—Ella es Gabriela y es la novia de Harry — informo Gemma y los dos comenzaron a reír, no pude evitarlo y solté una carcajada.
—No es mi novia— dijo Harry con fastidio, volteé hacia atrás y vi que Gemma le decía riendo que sí, con un pequeño movimiento de su dedo índice. 
—Soy Gabriela— sonreí —Pero no soy la novia de Harry — me dirige al niño cuyo nombre desconocía
—Yo soy Liam— dijo al igual que su hermana con una preciosa sonrisa. 
Es que en realidad era imposible, creer que estos tres tengan algún parentesco. Me gire nuevamente, antes de ser regañada por Harry.
Harry y yo íbamos en silencio, solo se escuchaban las voces de los niños y sus risas, según lo que entendía ‘Ali’ era la pelirroja que había visto en la tienda de música.

Llegamos a la que seguramente sería su casa, era realmente hermosa. Blanca, enormes ventanas, inmenso jardín. Sin duda una mansión.
Harry se estaciono y todos bajamos del auto, caminamos en silencio detrás de Harry hasta la puerta. Mientras esperábamos a que Harry abriera, note como la pequeña me observaba.
—Es muy lindo tu vestido— dijo tocándolo
— ¿De verdad lo crees?— le pregunte ahora muerta de ternura, asintió con la cabeza —Sabes…— le dije sonriente —Este es mi favorito— le confesé.
—Eres muy linda, te pareces a una de mis muñecas— dijo riendo 
—Hasta en lo plástica y hueca…— dijo Harry en un susurro al momento de abrir la puerta, entre no sin antes matarlo con la simple mirada. Lo que tenía de lindo lo tenía de bocón.

Entre y la casa parecía aún más grande por dentro que por fuera, la verdad no me extrañaría que al igual que Gemma y Liam, sus padres serian un mismísimo dulce de leche. Lo que me seguiría extrañando sin duda alguna seria Harry y su notoria amargura.
—Gemma, Liam— los llamo ya que corrían por la escalera —Quiero que hagan la tarea ahora— indico seriamente, no el grosero tono que usa conmigo obviamente —Estaré aquí abajo por si necesitan ayuda— a pesar de su ruda forma de hablar, me mataba de ternura.
Ambos niños asintieron con la cabeza y subieron las escaleras, Gemma agitaba su mano con una enorme sonrisa como diciéndome adiós. Le devolví el gesto. Me gire hacia Harry y le sonreí.
—Parece que a tu hermana le agrado a pesar de ser plástica y hueca— solté una carcajada 
—Solo porque le recuerdas a sus muñecas, no te emociones— dijo caminando hacia la que supuse seria la sala. 
Camine detrás de él hasta que llegamos a la sala, dejo su mochila en uno de los enormes sillones negros de piel, me senté y puse mi bolsa en mis piernas, saco el enorme paquete de hojas y lo dejo caer en la mesa de cristal del centro de la sala. 
—Ya vuelvo— dijo y salió por donde habíamos venido. 
Me acerque a la mesa y tome la guía, tome de mi bolsa un lápiz para poder contestar mientras Harry volvía.

sábado, 9 de marzo de 2013

Maraton/Capítulo 10



—Aquí tienes— le dije y el escucharme volteo. Y le puse la enorme guía en el pecho obligándolo a tomarla. Me di la media vuelta y volví a caminar.
—Hey, hey, hey— sonreí al escucharlo llamándome, mas mi nombre no es ‘Hey’ así que no voltearía —Te estoy hablando— me dijo sujetándome del brazo
—Disculpa, no recordaba llamarme ‘Hey’
—Bueno si… tu clon de April— bien, si seguía así me iba a hacer enojar. — ¿Que o quien te crees?— dijo con su ceño fruncido 
— ¿Eh?— dije sin entender
—Yo no hare todo el trabajo, así que…— tomo bruscamente mi brazo para regresarme la guía —…ten.
—Yo nunca dije que hicieras tú el trabajo. — le dije molesta —No cabe en mi bolsa y tampoco en mi casillero— le informe —Así que guárdalo— se lo regrese con más fuerza, aunque seguramente ni cosquillas le hizo. 
—Yo no lo voy a guardar— ambos ya estábamos más que molestos
—Bien, no lo guardes— se lo quite de las manos y camine hacia uno de las basuras, pise la pequeña palanca para que se abriera la tapa y lo deje caer. —Listo…— volteé hacia el —Problema solucionado— solo porque su mandíbula estaba sujeta a su cabeza, si no está hubiera perforado el piso. 

—Parece que alguien se topó con la horma su zapato— se burló Louis 
—No estoy para bromas— le dije molesta, en realidad no lo estaba.
— ¿Que paso?— pregunto divertido
—Le di la enorme guía de Física, no la quiso guardar yo tampoco así que la tire a la basura— le conté
— ¿Si escuchaste que valía como examen final? — Me recordó
—Sí, pero prefiero reprobar la materia antes que…
—…Antes de tragarte tu orgullo— no eran las palabras con las que iba a terminar la oración, pero estaba en lo correcto. —Te veo mañana— dio un beso en mi frente antes de irse. 
Continué sacando todas las cosas de mi taquilla, solo dejaría los libros. Era un desastre, tenía ropa, zapatos, maquillaje prácticamente de todo. Como pude cargue todas mis pertenecías, cerré el locker y casi todas mis cosas caen al suelo, al encontrarme con Harry detrás de la puerta.

—Que quieres— le dije de mala gana
—Mira… creo que tienes una idea, de lo mucho que me molesta tenerte cerca…— el tipo hablaba pero la verdad sus palabras me entraban por un oído y salían por el otro. Yo estaba completamente perdida en él, su chaqueta de mezclilla estaba abierta dejando ver su anatomía solo protegida por una camisa blanca, que para mí mala fortuna, en esta se marcaba su bien definido abdomen. – ¡Concéntrate!- me reprendió mi voz interior —…no reprobare esa materia por tus estúpidos caprichos, así que tu harás la mitad y yo la mitad— fue lo que logre escuchar al lograr ‘concentrarme’ me entrego la mitad de las hojas.
—No, no, no— negué seguidamente —No me arriesgare a que respondas mal y la calificación será para ambos— soltó una carcajada amarga —Le sacare copias y trabajaremos por separado.
— ¿Que no me escuchaste?— dijo molesto — ¡Te acabo de explicar que no se puede!— hablo con desespero — ¿Que no puedes dejar de pensar en ti por cinco minutos?— paso su mano rápidamente por su cabello con frustración –Si supieras en lo que pensaba…- reí estúpidamente por dentro.
—Entonces lo siento— dije hipócritamente —Tendremos que trabajar juntos, aunque no te guste— sonreí duramente —Yo tampoco reprobare por tus caprichos— da lo mismo si repruebo por mi culpa, pero si es solo porque al ‘niño’ le molesta estar cerca de mí, no da lo mismo.

Haciendo un gran esfuerzo de no caer con la montaña de cosas que traía en mis manos, le entregue las hojas —Mañana… ¿tu casa o mi casa?— pregunte caminando, dejándolo atrás. Soltó un gruñido y se escuchó un fuerte golpe en uno de los casilleros, sonreí victoriosa. 
—No puedo, trabajo. — escuche sus pasos detrás de mí
— ¿Tú casa, mi casa o reprobamos?— repetí
—TRA BA JO— repitió igual separando en silabas
—FAL TA— le respondí igual
—Yo si soy responsable— dijo mientras salíamos del edificio 
— ¿Cuántos años tienes? ¿Sesenta? —volteé a verlo, podría jurar que me detesta aún más que April.
Regrese mi mirada al frente pero no fue lo suficientemente a tiempo ya que choque con alguien, y esto hizo que todas mis cosas cayeran al piso. 
— ¿Por qué no te fijas por dónde vas?— me dijo de mala gana Zayn 
— ¿Y tú porque no te quitas de mi camino?— le dije de la misma forma, mientras me agachaba para recoger mis cosas. —Lo bueno es que estoy rodeada de caballeros— dije sarcásticamente casi en un grito, refiriéndome a Zayn y a Harry que solamente veían mis cosas esparcidas por el piso. De pronto un par de chicos llegaron presurosamente para ayudarme —Gracias— tome nuevamente todo en mis brazos 
—Si quieres te ayudo hasta tu auto y no se…
—Lárgate— Zayn y harry dijeron al unísono 

—Tengo que hablar contigo ahora mismo— ordeno Zayn y solo solté una carcajada. 
—Me encantaría pero…— dije sonriente —No… ¿sabes?— puse una cara pensativa —No me encantaría y tengo cosas muchísimo más importantes que hacer que escucharte— le sonreí ampliamente —…Mañana me dices que decides— le dije a Harry y reanudé mi caminar hacia mi auto.

Camine hasta mi auto sin voltear atrás, tengo que aceptarlo me moría por sabes sobre de lo que Zayn quería hablar conmigo, aunque era más que obvio sobre que quería 'hablar'. Pero valdrá la pena quedarse con la duda. Ya llegara el día en que regrese rogándome que vuelva con él y para eso, Harry me ayudara enormemente.

Me desperté ya con más ánimos, el dolor en mis piernas ya no era tan intenso como el de ayer, ahora si ´Glamour ven a mi ' {http://www.polyvore.com/me_myself/set?id=73836913 } Deje mi cabello como siempre.

Con suma seguridad caminaba por los pasillos, atrayendo miradas al por mayor. Adoraba tanto esto. 

Localice a Harry, sacaba libros de su casillero. -Debería de ser contra la ley que use ese tipo de pantalones- pensé debido a la masacre de hormonas que causaba en mi interior. Aunado a la roja camiseta en cuello 'v' que portaba, creaba una revolución en mí. 

— ¿Que decidiste Am?— le susurre en el oído por detrás, haciéndolo voltear bruscamente
— Primero... aléjate— me hizo a un lado —Y segundo ¿Por qué me dices Am?— pregunto sin entender
—Am... Por Amargado— solté una carcajada 
—Mira...— dijo con fastidio —Ya es bastante difícil tener que soportarte, así que trata de guardarte tus estúpidas bromas— cerro de un fuerte golpe su taquilla. 
—Tratare— le dije sonriente — ¿Entonces?— pregunte caminando detrás de él con ligeros pasos — ¿Tu casa o mi casa?
—Tendrá que ser en la mía— dijo de mala gana sin voltear a verme.
—Perfecto— canturreé y entre a mi siguiente clase.

Las clases pasaron muy rápido, como siempre Louis me ayudaba a distraerme y hacerme un poco más divertidas las horas. 
— ¿De verdad te llevara a su casa?— pregunto Louis
—Sí, solo para hacer la inútil guía de física— le explique —El chico sigue resistiéndose a mis encantos— ambos reímos 
—Te lo dije. — Sonrió victorioso —Es mejor que te rindas honey.
—Mira Tomlinson... en cuanto menos te lo esperes— lo señale —Lo voy a traer tras de mí— sonreí.

Fui de las ultimas en salir. Reuní pacientemente todas mis cosas. La verdad no tenía prisa alguna, además con suerte y haría enojar a Harry.

Maraton 2/Capítulo 9


— ¿Por qué me fastidias?— logre reconocer el rostro de Harry en medio de la oscuridad, era Harry el que me sujetaba del cuello y me miraba con toda la ira del mundo.
— ¿Yo? ¿Fastidiarte?— afortunadamente la actuación es algo que se me da — ¿Ahora que hice?
—Volverte animadora, ese grito— sentía su respiración mezclándose con la mía —Entiéndelo, no me interesa nada relacionado contigo, ni amistad y mucho menos tu ‘apoyo’— libero mi muñeca pero mi cuello seguía siendo prisionero.
— ¿Seguro?— susurre sobre sus labios mientras subía mis manos a su cuello, solo que yo al contrario de él, lo acaricie suavemente. 
Trago saliva, aunque lo disimulara olímpicamente, estaba nervioso. Detuve mis manos en su nuca, para lentamente eliminar los escasos centímetros que nos separaban. 

Capture su labio inferior succionando de este para iniciar el beso, el permanecía rígido. Pero al rozar mi lengua por su labio superior esto cambio. Su mano que sujetaba fuertemente mi cuello, redujo la fuerza con la que lo hacía, al mismo tiempo que ponia su otra mano libre en mi cintura. Me siguió, sus carnosos labios se rozaban con los míos de una manera increíble. Había perdido el control, ahora el llevaba el ritmo del beso mientras que yo lo seguía. Sus dos manos se encontraban en mi cintura, sus brazos estrujándome hacían aún más increíble el beso, comenzó avanzar hacia mí y por inercia comencé a retroceder. Seguimos retrocediendo, hasta que chocamos con el que seguramente sería mi auto.
- ¡Rayos!- pensé al escuchar que la alarma se había activado.
Styles se separó bruscamente de mí, dejándome completamente aturdida.
—Sabía que eras fácil— susurro en mi oído, sacándome del estado en el que estaba —Pero no creí que tanto…— me miro despectivamente y se dio la media vuelta.
—Todos saben que es más fácil conseguir ver al presidente en persona, que obtener una cita conmigo— podía decirme lo que quisiera, falsa, hipócrita. Pero fácil, Nunca.
—Pues ya te lo dije— volteo y se acercó nuevamente a mí —No me interesa conocer en persona al presidente y muchísimo menos una absurda cita contigo— me señalo con su dedo índice.
—Hablas…— le dije bajando su mano —Hablas como si realmente me conocieras. — me había dicho, falsa, hipócrita y fácil en solo dos veces que ‘hable’ con él.
—No necesito conocerte para saber cómo eres.
— ¿Eres psíquico o brujo tal vez?— solté una carcajada y él seguía con su mirada de pocos amigos —No… ya se Adivinó— conteste obvia y volví a soltar una carcajada.
—Mira…
—Adivina que numero estoy pensando— bromee sin poder parar de reír
—Ves…— dijo con su fuerte forma de hablar —No necesito conocerte para saber que eres una hueca igual a April y el porque la sigue siempre— mi risa cesó. Me estaba comparando con April Baker. 
— ¿Yo igual que April? ¡Ja!— me burle 
—Da lo mismo, solo aléjate de mí— dijo antes de darse la media vuelta.


{ http://www.polyvore.com/me_myself/set?id=73471509 } Las piernas me mataban, pero si dejo a las Animadoras ahora, digamos que se verá algo obvio. Así que no estaba entre mis planes. 

— ¿De verdad eres tú?— pregunto Louis cuando me vio — ¿Y tus zapatos altos?— reí, era raro que yo no trajera tacones.
—Me duelen mucho mis piernas, brazos y garganta— me queje 
—A… pero tú querías ser animadora— rio 
—Cállate— le dije riendo. Justo en ese momento, Harry venia caminando por el pasillo— ¡Es un estúpido!— gruñí —Si no fuera por la apuesta, que se diera por muerto.
—Creo que no te fue muy bien con el tercer pájaro— soltó una carcajada
—Al inicio si— sonreí 
— ¿Entonces qué paso?
—Me reclamo, lo bese, me beso, me comparo con April— sabía que Louis se burlaría por horas por el último suceso, 
—Te comparo con April— rio aún más
—Si ya, ya no es para tanto— le dije con fastidio —Oye pero… ya logre que me besara, gane la apuesta ¿no?— subía y bajaba mis cejas con rapidez
—Yo no estoy seguro de que te haya besado— sonrió —Además sería más fácil, si solo fuera un beso y ya— lo mire fulminantemente. 
— ¿Entonces qué? ¿Un anillo de matrimonio?
—No, no lo sé honey mínimo un ‘te quiero’ publico.
— Louis!— alargue. Que no veía que el tipo era más duro que una roca y quería que le sacara un ‘te quiero’ frente a más personas.
—Oh vamos honey tienes un mes completo…— rio —Pero si tú no quieres, la cancelamos y ambos nos quitamos de problemas.
—No— conteste rápidamente. Yo ganaría esta apuesta. Cerré mi casillero. —Pero lavaras mi auto por seis meses— agregue riendo
—Solo si por un milagro llegaras a ganar— se burló
—Búrlate lo que quieras Tomlinson— le dije riendo mientras caminaba hacia clase.

Entre al aula, seguida por Louis. Y logre ver en los asientos del centro Eleanor. 
—Me iré a sentar con mi novia— dije haciendo una extraña voz
—Aparte de bonita, lees mentes— en cuestión de segundos ya estaba sentado a un lado de ella. Camine hacia mi lugar de siempre, solo que ahora tome el lugar de Louis hasta el final. 

—Jóvenes— hablo el profesor de física —Les tengo una muy buena noticia— acomodo sus pequeños lentes. —Cancele el examen final— todo el salón grito de felicidad —Seguro se preguntaran como les calificare— aseguro y alguien soltó un ‘no’ haciendo que nuevamente un escándalo se apoderara del salón — ¡Jóvenes! ¡Atención!— grito logrando que todos se callaran. —Gracias— dijo cuándo logro controlar la clase 
—Por equipos contestaran una pequeña guía— saco un paquete de hojas, de debajo del escritorio. —Los equipos los formare yo, más bien las parejas— aclaro 
– ¿Por qué?- pensé molesta no hay nada peor que los maestros formen los equipos, ahora valla a saber con quién me tocara. Los trabajos por equipos siempre los hacía con Louis. 

Nombro el primer equipo y le pido a uno que pasara para entregarle la hoja de la guía.
—Ten— le dijo el maestro entregándole todo el paquete de hojas, 
— ¿Las reparto?— pregunto inseguro
—No… esa es la guía. — la pequeña guía, era un paquete de cien hojas. Sin duda estaba loco.
—Louis Tomlinson y…— miro la lista buscando al otro integrante —Eleanor Calder— Louis paso y tomo la monstruosa guía.
—Gabriela Smith  — me puse de pie para tomar la guía —Tu iras con…— dijo mientras buscaba en la lista —Harry Styles.
-Para, para, para tiene que ser una broma- pensé incrédula –Si él ni siquiera está en esta clase- volteé a ver a Louis quien con la cabeza disimuladamente indicaba hacia atrás. Efectivamente ahí estaba, con su cara de ‘soyelmasamargadodeluniverso’ 

Rodé mis ojos y camine hacia mi asiento, logre ver la sonrisa burlona de Louis y justo cuando pase lo golpeé con el paquete de hojas.
No me molestaba trabajar con él, además me ayudaría más en mi objetivo. Aunque seguramente a él no le gustara nada, tener que pasar tiempo conmigo. 
El profesor siguió dando las indicaciones del trabajo, pero yo seguía en mi mundo. 
Como era que no me había dado cuenta de que estaba en mi mismo salón. Según yo, solamente estábamos en Historia. ¿Porque el idiota de Louis no me lo había dicho?

El timbre sonó liberándonos de Física pero encadenándonos a la siguiente clase. Rápidamente el salón se vació. Tome mi bolsa que estaba a mi lado para guardar el enorme paquete de hojas, pero este ya no cabía. 

Camine hacia mi casillero, dejaría la bestial guía ahí y antes de salir regresaría por ella, pero mi plan cambio. Al ir por el pasillo logre divisar a Harry en el que seguramente sería su casillero. Acomode mi cabello mientras caminaba en su dirección